En el día a día de los bailarines, puedes encontrarte personas maravillosas que te acompañen en tu proceso, pero también es cierto que hay otro perfil que no siempre es beneficioso para tu salud. Esos son los bailarin@s tóxicos, y hoy te enseño cómo identificarlos.
No importa si llevan poco o mucho tiempo bailando. Si cumplen uno solo de estos cinco comportamientos tóxicos debes identificarlos enseguida para darte cuenta de que no son el ejemplo a seguir:
- Querer estar delante de la clase siempre: Es cierto que cualquiera que esté bailando en una clase de baile quiere colocarse delante para ver mejor al profesor/a y para entender mejor los pasos, pero eso no debe afectar a las oportunidades del resto de compañeros, por lo que si alguien decide quedarse siempre delante, ojo al dato.
- Risas malintencionadas cuando un compañer@ se equivoca: Es normal equivocarte de pasos, y como ya sabrás, todos hemos empezado a bailar y hemos cometido errores. Si alguien se dedica a burlarse de los fallos ajenos, es claramente un comportamiento tóxico. ¡Ni que ellos fueran perfectos!
- Criticar al profesor o a los compañeros: Un hábito o comportamiento tóxico es hablar mal de tus compañeros a sus espaldas y criticarlos, tanto a ellos como al profesor. Ni que decir que fuera del ámbito del baile es algo negativo también.
- Ver al resto de los compañeros como competencia: En las clases de baile lo primero que tiene que haber es compañerismo, por eso si crees que alguien de tu clase prefiere verte como competencia, es mejor que te alejes de él o ella. No te aportará nada bueno.
- Los famosos «grupitos» en clase: es normal que en una clase de baile se generen grupos por afinidad de las personas, pero lo que no es nutritivo es que ello genere discriminación al resto con grupos blindados y que se creen muy «top». Si tienes un grupo de amigos en clase, procura que el resto se sienta integrado y no os aisléis de la clase.
Estos 5 comportamientos tóxicos que he comentado – que seguramente no sean los únicos – no suelen tenerse en cuenta o no se les presta atención y por tu salud es importante que los sepas identificar.
Pero no quiero que te quedes con esto solamente, sino que vayas mucho más allá y seas capaz de evitar decir y hacer estos comportamientos para ser un bailarín/a totalmente sano. Al final, cuando bailas y transmites tus sentimientos, todo se nota, incluso la toxicidad.
No dejes que nadie te frene y haga que dejes de bailar por comentarios inapropiados. Confía y gana seguridad en ti mism@ y déjate llevar por lo que dice tu cuerpo y tu mente, no tus compañeros.
Si te ha sido útil esta información, no dudes en seguirnos en nuestras redes sociales Instagram y Facebook y accede a nuestra página web para empezar tus clases de baile.